1 Crónicas 28:20
Dijo además David a Salomón su hijo: Anímate y esfuérzate, y manos a la obra; no temas, ni desmayes, porque Jehová Dios, mi Dios, estará contigo; él no te dejará ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová.
Muchas veces nos desanimamos, otras más tenemos miedo, por eso es necesario que la palabra de Dios traspase nuestra mente y llegue hasta nuestro corazón para que quede infundida en nuestra alma.
Cuando la palabra esta arraigada, no permite, que abandonemos el camino que él nos ha trazado.
Necesitamos esforzarnos y ser valientes para continuar con la obra que Dios nos ha encomendado.
Dios no permitirá, ni dejará que abandonemos este poderoso llamado es necesario continuar, hasta que se ha concluido, por eso necesitamos que nuestra mente se alinee con nuestras acciones para que los resultados sean visibles, para que todo aquello que Dios está hablando a nuestra vida lo pongamos en obra.
Contamos con la ayuda del Señor Jesucristo, necesitamos disponer de nuestro corazón para alcanzar sus promesas y esforzarnos en cada área donde queramos flaquear.
Recordemos que tenemos un Dios que nos levanta, nos empodera, un Dios que nos sostiene y nos ama.
Solo a través de Jesús esas promesas se harán una realidad en nuestras vidas.
Comments