Juan 20:29
Jesús le dijo*: ¿Por qué me has visto has creído? Dichosos los que no vieron, y sin embargo creyeron.
Tomás fue reprendido por su Incredulidad
¿Estas cómo Tomás, esperando ver tu milagro, para creer en el poder de Jesús?
O ¿Eres dichosa, porque sin ver, ya lo haz creído con tu corazón?
Tomás no creyó y era uno de los 12 apóstoles.
Tomas no les creyó, ni aún a sus propios compañeros, con los que anduvo día a día, aquellos que ya habían visto a Jesús y con los que había compartido juntos la travesía al lado del Mesías.
Jesús escuchó todo y supo que Tomás estaba falto de Fé, aun así no acudió enseguida a las exigencias y tardó una semana en demostrarle solicitado.
En este pequeño Devocional el Señor te pregunta hoy.
¿Está tardando Dios en demostrarte lo que le haz pedido?
¿Dónde hay incredulidad en tu vida?
¿En qué áreas te quiere confrontar el Señor esta mañana?
¿Estoy como Tomás, que no le creo ni a mis compañeras de viajé?
Y es que sabes testimonios de tus compañeras, lees testimonios del Ministerio y aun así sigues dudando de la magnitud de lo que Dios puede hacer si le crees y le obedeces.
Todo esto lo está permitiendo Jesús, para que crezcas espiritualmente y tú Fé madure.
Pero recuerda...Dichosos los que no vieron, y sin embargo creyeron.
¡Se dichosa! Créele a Jesús y deja la Incredulidad.
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