Marzo 01 2024
He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad. Isaías 43:19.
T e s t i m o n i o d e V i g i l i a.
El día que recibí la invitación a la oración, tenía una lucha en mi mente, mi esposo llegó el domingo a casa, después de no verlo tres meses, y no sabía cómo reaccionar, como dirigirme hacia él. Puse en las manos de Dios ese encuentro, y que hiciera su voluntad en mi hogar. Mi hija mayor estaba contenta, la pequeña no lo reconoció, y lo único que hizo, fue llorar cada vez que la cargaba; "eso" lo molestó, entre nosotros no dirigimos casi ninguna palabra, sólo hablamos sobre la salud de mi hija, si está en los planes de Dios, se va a operar de la vesícula, por lo de la pandemia es un poco complicado. Llegó la hora de que se marchara, y se despidió de todos, de nuestras hijas y de mis suegros, menos de mí. Les confieso que me sentí triste y sentí pena, porque mis suegros vieron que no se despidió. El resto de esa tarde sentía un nudo en la garganta y mucha tristeza, pero por faltarle a Dios. Fui a mi cuarto de guerra, y le pedí perdón, porque estaba permitiendo que algo más ocupará mi corazón, cuando sólo debe ser Él.
En oración le dije: mi corazón es tuyo y si te tengo a ti lo tengo todo, perdóname por desear algo de mi esposo, cuando te tengo a ti.
En la noche recordé Isaías 43:19, He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la soledad. Sentí paz, pero había algo que me hacía sentir rara, el enemigo empezó a llenarme de pensamientos de duda. Mis hijas se durmieron y pude orar y llorar, en mi oración seguía implorando a mi Amado, que me ayude aferrarme a sus promesas, son lo único que tengo en mi Desierto.
Le preguntaba: ¿acaso ya no son para mí tus planes? ¿son otros?
Pero, pase lo pase, mi corazón es tuyo.
El lunes, meditando en Isaías, me escribe la ministra diciéndome sobre la vigilia, le respondí que sí estaría con ellas.
Gracias Dios, por acordarte de mí, lo puse en sus manos para que me permitirá estar despierta, que el cansancio no ganara.
El martes, le pedí a Dios que mi nena se durmiera sin ningún problema, le dije a mi hija que se acostara, porque tendría una actividad con el grupo, (a mi hija le gusta todo lo tenga que ver con orar por nuestra familia) antes de dormir oramos y ella oro por la vigilia, para que yo pudiera participar y que todo fuera para la Gloria de Dios. Es hermoso lo que Dios hace en el corazón de nuestros hijos, mi sorpresa es que mi nena se despertó y pensé ¡Dios mío! ¿no podré llevar acabó está vigilia? y seguía orando, pidiéndole a Dios que por favor ella se duerma, estuvo despierta como una hora y de ahí tuve el tiempo necesario para disfrutar de la compañía de mi Amado. Mi nena durmió toda la noche hasta que terminó la vigilia, solo despertó para tomar pecho y así logré dormir un ratito. Hasta en esos detalles Dios es amoroso.
Lo más importante de todo esto, es que pude disfrutar de su amor una vez más. Recordar cada una de sus promesas y decir: ¡gracias mi Rey! porque son mías, porque que se cumplirán conforme a tú voluntad, así como dice Su palabra: Salmos 31:15 En tu mano están mis tiempos, líbrame de la mano de mis enemigos y de mis perseguidores.
Y sí, en sus manos está mi vida y la de mi familia.
No puedo describir todo lo que sentía en ese momento, sentía nervios, no sabía cómo sería, nunca había participado en algo así y cuando mandaron el formato para nuestra promesa no sabía cómo escribir, le pedí a Dios que dirigiera mis palabras, y saben, Dios uso a una hermanita del grupo para decirme que lo que escribiría lo hiciera con el corazón, la verdad tenía dudas en cuanto como hacerlo, sentía que no tenía las palabras correctas, pero ÉL me lleno de su amor y cada palabra estaba llenar de amor para ÉL y de agradecimiento por éste momento.
El domingo haciendo mi devocional, leí en un salmo 102:13 Te levantarás y tendrás misericordia de Sion, Porque es tiempo de tener misericordia de ella, porque el plazo ha llegado. Y esa noche, me acordé de estás palabras, se terminó ese tiempo de tristeza y dolor, de sentirme rechazada cuando tengo a mi lado a un ser maravilloso, es nuevo comienzo, porque volví a rendir toda mi vida y la vida de mi familia, la vida de OM, y de la hija de ambos;
Que haga su voluntad en mí, siempre es perfecta, de algo estoy segura, cosas nuevas está haciendo. Sólo Él, puede
abrir camino en el desierto.
Disfrutemos de su amor, de sus promesas, porque son nuestras, porque si hemos sentido que cada una de ellas estremecen nuestro corazón, es porque Él nos está diciendo: confía que grandes cosas haré contigo.
De nuestros ET se encarga nuestro Amado, y su palabra lo dice Proverbios 14:14: De sus caminos será hastiado el necio de corazón; Pero el hombre de bien estará contento del suyo.
Muchas veces he pensado que las promesas que me hace escuchar mientras duermo o en sueño son sólo imaginación mía, pero están escritas en su palabra y su palabra no miente, es verdad y esta vigilia, me hizo recordar cada una de ellas, abrazarlas de nuevo.
Pidamos sabiduría para hacer siempre la voluntad de Dios, rindamos nuestra obediencia. El temor de a DIOS y la Obediencia a los principios que enseña su palabra, son la mejor defensa que tenemos en contra del enemigo de nuestra vida.
Confiemos mis amadas a su debido tiempo segaremos sino desmayamos, caminemos por fe y no por vista, porque fiel es Él que prometió.
LA GLORIA ES PARA MI REY Y MI ADORACIÓN POR SIEMPRE SÓLO ANEHELO AMARLO COMO ÉL SE MERECE.
AQUIEN TENGO YO EN LOS CIELOS, SINO A TI, Y FUERA DE TI NO DESEO NADA EN ESTA TIERRA.
Quiero agradecer a mi Amado por permitirme este momento, por los detalles que tiene conmigo y a cada una de ustedes por permitirme ser parte de este encuentro con Dios.
Abigail.
México.
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