Octubre 17 2024
Si me amáis, guardad mis mandamientos; Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
Juan 14;15.
"TESTIMONIO DE OBEDIENCIA"
Dios les bendiga amadas, hoy quiero contarles un hermoso testimonio que lo viví en la mañana; Saben, no salgo mucho en las mañanas, esporádicamente lo hago, pero hoy tuve que hacer una diligencia de urgencia, y mi esposito hermoso terrenal, me pide que cuando regrese vaya a comprar a un almacén que me llevaba hacer un viraje de mi camino, y de verdad que no pensaba hacerlo (jaja lo pensé nada más.) Volviendo de mi diligencia dije esto en mi mente: mejor voy al almacén que queda más cerca a mi edificio, pero en eso, el Espíritu Santo me dijo: "OBEDECE" y en ese momento dije: Señor, está bien voy a obedecer, perdóname por no querer hacerlo; En eso, de camino al almacén que mi esposo me dijo, veo a este hombre acostado en un banco de cemento, que ya lo había visto a la ida, y dije: Señor por algo me has traído por aquí, así que voy a comprarle algo para que coma, como si fuera para ti, y le compre "una tajada de queque" ¡el mejor y el más rico! Y en eso, les confieso que iba sin motivación, porque siempre cada vez que le daba algo alguna persona indigente no me recibía, y empecé a orar mientras caminaba y le decía: Señor dame poder para llegar a este hombre y etc. Me voy acercándome más y vi su rostro, un rostro cansado, abatido y sentí que mi corazón se partía, pero de tristeza y sobre todo de remordimiento, porque sé que Dios orquestó todo para que este hombre muchas veces olvidado por la sociedad, pero nunca por Dios, esté ahí en el lugar preciso y reciba no solamente algo físico, sino una palabra de Dios, y también aprendí algo muy importante obedecer sí o sí, que la obediencia no es negociable, y más aún, a nuestro Dios, así que amados les exhorto a que siempre estemos en obediencia, aún en lo más mínimo y que la obediencia trae bendición, como dice en la palabra, y hoy me trajo bendición y gozo al ayudar con algo pequeño a este hombre, Dios les bendiga, amén.
Emma Matos.
C3D MINISTERIO.
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