El diablo busca devorar a los creyentes.
1 Pedro 5:8
Sean de espíritu sobrio, estén alerta. Su adversario, el diablo, anda al acecho como león rugiente, buscando a quien devorar.
Satanás y sus demonios conspiran contra los cristianos.
Tal como Satanás intentó hacer con Jesús, las fuerzas demoníacas nos tientan a pecar y se oponen a nuestros esfuerzos por obedecer a Dios.
Estos ataques, son resultado de la opresión.
La opresión demoníaca es cuando un demonio es temporalmente victorioso sobre el cristiano tentando exitosamente a un cristiano al pecado y dificultando su capacidad para servir a Dios con un fuerte testimonio.
Cómo creyentes y seguidores de Jesús, no debemos permitir que el enemigo gane la batalla de la opresión, no permitas que los demonios tengan éxito en estos ataques, dónde quiere tirarte al suelo para que no avances, el detesta ver el triunfo de Jesus en tu vida.
La opresión demoníaca es muy distinta de la posesión de demonios.
La opresión se ejerce hacia el cristiano para hacerlo caer en pecado.
Si te has sentido tentada en hacer situaciones del pasado, cosas o vicios, busca ayuda espiritual, diles que estas siendo víctima del adversario para que caigas en la trampa de la tentación, la cual te regresara al pecado donde de ahí te saco el Señor.
Es muy importante recuerda que después de la tentación, viene el pecado, el cual solo trae una falsa satisfacción que te conduce de nuevo a la tristeza y el dolor.
No caigas en la trampa de la operación opresión demoníaca hacia tu persona, ora, ayuna, sal de ese lugar donde te quiere llevar el enemigo y pide ayuda a tus hermanas en Cristo y Ministras para que no seas víctima del devorador.
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