top of page

OBEDECIENDO HASTA EL FIN, DIOS NO OLVIDA NADA.

  • Writer: Cordón 3 Dobleces
    Cordón 3 Dobleces
  • Mar 29
  • 4 min read


"Señor, enséñame el camino de tus mandatos, y yo lo seguiré hasta el fin" Salmos 119:33.


Testimonio de Restitución.


Dios las bendiga amadas, la paz sea con ustedes, hoy vengo a contarles mi testimonio, diría, uno de mis más hermosos testimonios que he tenido para la gloria y honra de quien sirvo, mi amado Señor Jesucristo.



Empiezo diciendo que mi Señor no se olvida de nada, si amadas ¡de nada! Hace unos meses hice mi testimonio de confesión, incluso como buena guerrera que soy, investigue todo acerca de la restitución, me acuerdo de que le pedí a mi ministra que me diera su opinión acerca de todo esto, y amadas, aquí empieza la parte más hermosa de mi testimonio: esto consistía en 3 pasos: CONFESIÓN, PERDÓN Y RESTITUCIÓN.


Los tres los hice con guía del Espíritu Santo, la confesión la hice a través de mi testimonio, el pedir perdón lo hice a través de un hermoso y orquestado tiempo de ayuno a la persona que debí pedirle, y restitución la hice, pero debo decir que esta parte fue la que más me agradó, de como Dios lo organizó. Les cuento amadas, abran sus corazones para recibir este hermoso testimonio (me lleno de tanto gozo al contar esta parte) Primero le dije a mi Dios, Señor ¿y ahora a quien quieres que restituya? porque tenía que hacerlo de manera económica (si amadas, en las cosas del Señor, si o si se tienen que hacer sin “ningún pero que valga,” lo menciono porque hay algunas mujeres hijas de Dios, que todavía no sueltan esa área de sus vidas "lo económico.")


Orando y ayunando para que Dios me muestre a la persona que tenía que restituir, ya sabía quién era, es una mujer muy pero muy hermosa; ¿saben que fue que me confirmó al 100 por ciento que era ella la elegida para la restitución? Fue que la llamé y empecé hablar con ella y casi lo primero que me dice es: ¿Sabes Emma? también me convertí y me hice cristiana y ahí fue que el Espíritu Santo dijo a mi espíritu: ¡ella es la elegida! Amadas, les digo esto como un plus para ustedes; cuando nos entregamos y estamos caminando en la dirección del Padre, él nos bendice en todas las áreas.


Le pregunté si podía bendecirla, y ella me dijo que sí ¡por supuesto!

Cuando tu dispones tu corazón a obedecer a Dios, Él pone todo lo que necesitas, ¿saben? Cuando leí todo acerca de la restitución, leí que se debía pagar 4 veces de la deuda, amadas para la gloria y honra de mi Señor Jesucristo, hace unos meses mi hermana de sangre que vive en Estados Unidos, me dice: Emita te voy a mandar un dinero para mis sobrinos y para ti. Y guardé el dinero que era para mí, no lo gasté, no lo necesitaba, gracias a Dios tengo al papá de mis hijos que provee en todo, a mis hijos y a mí.

Entonces dije: Señor ¿ese dinero es verdad para la restitución? Lo dije, me acuerdo mirando al cielo con una cara de felicidad, y amadas, veo cuanto es de conversión en la moneda de la hermana elegida para la restitución y ¡¡¡oh sorpresa!!! Era la cantidad de 400, es decir hasta ese detalle, Dios lo hizo, ¡mi cuenta ya era pagada y cancelada en el nombre de Cristo Jesús!

Pero eso no es el motivo de mi testimonio, el verdadero motivo de mi testimonio es que no lo hice testimonio físico, me faltaba dar testimonio de la restitución, y ¿porque lo doy ahora? porque el Espíritu Santo me lo dijo cuando orando le dije a Dios: Señor ¿qué pasa? ¿porque hay impedimento en tomar la santa cena? ¿qué hecho mal? que pasaba porque iban a ser 3 meses, y orando el Espíritu Santo me dijo: te falta contar tu testimonio completo. Me faltaba solamente el de la restitución y en ese momento dije oh mi Dios, perdóname por no hacerlo todo como se debe, y amadas, aquí me tienen, contando y dando finalizado mi testimonio de Confesión, Perdón y ahora para la gloria y honra de mi Señor Jesucristo, de RESTITUCIÓN.


Quiero finalizar diciéndoles, que Él Señor no olvida y si tú le has hecho alguna promesa trata de cumplirlas, y si Dios te ha ayudado en algo que solo Él podía hacerlo, testifica amada, porque solo Él se merece toda la gloria y honra, y aparte tu testimonio ayudará a otras mujeres y, sobre todo, estarás manifestando como toda buena hija de Dios, del gran poder de Dios para que lo puedan ver otros y creer en Dios, amén y amén.


Sean bendecidas todas, y recuerden que Dios obra en mujeres que puedan testificar lo que ha hecho con ellas, porque si nosotras callamos nuestro testimonio, ¿cómo sabrán otras mujeres del poder de Dios? Déjate usar por él, amada, Dios no puede obrar en ti, si tu no lo permites.

Pd: Testifica siempre del verdadero amado de tu alma, tu Señor Jesucristo.


Dios las bendiga.


Emma.

Ser Animada.





 
 
 

Comments


  • Instagram
  • 5a4e2ef62da5ad73df7efe6e
  • Black Facebook Icon
bottom of page