Me aferró a las muchas lecciones que aprendí en esa época.

Es poderoso es cuando el Señor nos pasa por un desierto.

Solo en el desierto podremos salir de la esclavitud. durante esa misma travesía en el desierto, aprenderemos a servirle, pero lo más maravilloso, es que encontraremos a Dios, él nos mirara y nosotros podemos florecer, solo en el desierto.

Algo poderoso que también sucede en el desierto, es que él nos pastoreará y nos infundirá aliento y Nueva vida el desierto es tan importante en nuestras vidas que cada una de estas lecciones aprendidas en el desierto nos sostendrán en otras batallas.

Lo aprendido en el desierto, será lo que usemos cuando lleguemos a la tierra prometida, para no olvidar de dónde nos sacó el Señor.

Durante el desierto enfrentas grandes desafíos pero también desarrolladas capacidades que de manera sobrenatural Dios nos dota durante este trayecto.

Aferrarnos a cada una de las lecciones que aprendimos en el desierto, para tener victoria total en la tierra prometida, será necesario para nunca más volver de donde él lo sacó.

Isaías 35:1-10

Que se alegre el desierto, tierra seca; que se llene de alegría, que florezca, que produzca flores como el lirio, que se llene de gozo y alegría. Dios lo va a hacer tan bello como el Líbano, tan fértil como el Carmelo y el valle de Sarón. Todos verán la gloria del Señor, la majestad de nuestro Dios.