¡LO VOLVISTE HACER!

¿Dónde cayó? - preguntó el hombre de Dios. Cuando le mostró el lugar.

Eliseo cortó un palo y lo tiró al agua en ese mismo sitio.

Entonces la cabeza del hacha salió a flote.

2 de reyes 6:6

¡Amado mi Señor todopoderoso grande, misericordioso y fiel a ti toda la honra y la gloria en el nombre de Jesús!

Este Testimonio es para exaltar a Cristo Jesús siempre cuando me encuentro en apuros el Señor lo resuelve. Para mí es importante resaltar el nombre de Cristo, que lo conozcan en todas las naciones. Que maravilloso saber que Jesús escucha las plegarias. Haciendo un recuento para dar Testimonio de lo que Él me ha ayudado en este tiempo en encontrar objetos perdidos, es que he recurrido a Él como primera instancia siendo mi Amado Esposo Celestial y el versículo que me saca de apuros es 2 Reyes 6:6, es Poderoso remedio para encontrar cosas perdidas.

Este Testimonio se refiere solo a esta área de objetos perdidos que las Gracias, mi Señor los he encontrado. Enumeraré 3: la primera fue cuando se perdieron las tijeras en el patio y se buscaron por todos lados, pero no aparecieron, lo asombro fue que donde se había buscado no estaba al principio, pero cuando ore, este versículo, al ratito Dios me hizo ir otra vez al mismo lugar y ahí estaban ¡asombroso!

La número 2: se perdieron los controles de la televisión, en ese tiempo tenía una escuelita y había un niño muy pequeño que le gustaba hacer travesuras y los escondió, eran tres controles, no nos habíamos dado cuenta que estaban perdidos, hasta que se fueron los niños y se empecé a buscar, se buscó debajo de los muebles y nada, le hablé a su mamá por si los llevaba en su mochila y me dijo que revisó y nada. Empecé a orar y el Señor me dijo busca debajo de los muebles y le dije si ya se revisé y nada. Mi Señor me hace recordar a Pedro cuando estaba pescado y nada había pescado y el Señor le dijo que otra vez lo hiciera, esto es en Lucas 5:4-11; entonces le dije: iré a buscar y efectivamente ahí se encontraban los tres debajo del mismo asiento que antes se buscó, la verdad todos se sorprendieron.

La tercera fue que volví a orar el versículo del "hacha" porque la credencial de elector de mi hermano no aparecía y con esa se tenía que hacer trámites para su situación que necesitaba mi hermano y al no encontrar la tarjeta tenían que hacer varios trámites; también mi hermano se disgustó conmigo y era un caos, todo era presión que me hacía sentir el enemigo, pero permanecí confiada en Dios. La tarjeta fue buscada en todos los lugares posibles de la casa y nada. Ore otra vez recurrí al versículo de 2de Reyes 6:6 y después de dos días el Señor me da el lugar exacto dónde se encontraba, justo cuando leía Juan que habla sobre el Pentecostés, el Espíritu Santo sopló y ahí en ese mismo instante me reveló que estaba entre las tarjetas de mi papá. En ese mismo día fui con mi papá y le mencioné y me dijo no creo, pero busco y sí ahí estaba la tarjeta de elector de mi hermano.

El Señor me libro de tantos trámites, como del enojo de mi hermano, ¿no creen que sea sorprendente mi Amado Jesús?

¿Qué haría sin Jesús? Solo les puedo decir que siempre lo busquen con todo el corazón y confianza, que Él resuelve toda situación difícil e imposible. Él es especialista perfecto.

Te exalto Amado mi Señor Jesús, para que glorifiques a tu Padre Dios. Gracias por estar en mi vida y hacerme más fácil cada situación. Bello, hermoso eres mi Señor, a ti toda la alabanza.

En el nombre poderoso de Jesús, amén.

Bendiciones.

Cristina.

C3D MINISTERIO.